La Logia Paz y Concordia N°13, de Concepción, ha iniciado un proceso de organización de su archivo histórico, identificando y catalogando los volúmenes existentes y sometiéndolos a un proceso de limpieza y catalogación. Manuel Romo, Director de Investigación Histórica de la Gran Logia de Chile viajó especialmente invitado a la Logia Paz y Concordia ubicada en Concepción para conocer los documentos, de valor patrimonial, de la Logia. En sus palabras, el siguiente paso será buscar “los tomos que podrían permanecer en otros depósitos documentales o en manos de particulares. Una vez hecho esto, se iniciará un proceso de digitalización, para preservar los originales y facilitar la consulta del material existente”.

El depósito documental consta de libros que recogen las actas manuscritas y mecanografiadas; el registro de quienes formaron parte del cuadro logial, enriquecido con datos biográficos y masónicos; libros de asistencia, libros de contabilidad y correspondencia enviada y recibida.

Este archivo en particular tiene sus documentos más antiguos fechados en junio de 1883, época en que se fundó la Logia que retomó los trabajos masónicos interrumpidos en 1865.

“Al igual que los demás archivos masónicos, el que conserva la Logia Paz y Concordia N°13 reviste importancia no solo para la historia de la Masonería, sino que para la historia de la ciudad y de la región en que los hermanos desarrollaron y continúan desarrollando sus actividades benéficas.

En estos viejos manuscritos, el investigador hallará antecedentes sobre la fundación de interesantes obras masónicas, como la Sociedad Protectora de Estudiantes Pobres, el trabajo con la sociedad de socorros mutuos de obreros, el periódico La Lectura (1912-1915) o la creación de la Universidad de Concepción, agregó el Hermano Romo.

Uno de los proyectos que estudia la Logia Paz y Concordia N°13, para

subrayar la importancia de su rico archivo, es la publicación de un libro que contendrá las biografías de sus primeros cien integrantes, cuyos nombres están asociados a la historia de Concepción, pero también a la de Talcahuano, Coronel, Tomé, Chillán y Los Ángeles.

El trabajo que está haciendo la Logia Paz y Concordia N°13, constituye un valioso ejemplo de lo que puede hacerse para preservar la documentación relativa a la historia de la Masonería y, por consiguiente, del país.