Hace escasas semanas, la región de Valparaíso se vio azotada por un megaincendio que se concentró en las comunas de Viña del Mar, Quilpué, Limache y Villa Alemana y que fuera catalogado como la mayor tragedia desde el terremoto de 2010. Cientos de familias quedaron en la indefensión y desamparo. Las llamas, como es sabido, se iniciaron en las inmediaciones del Lago Peñuelas y cual bolas de fuego se extendieron hacia los bosques, industrias y viviendas.

Recaudación de fondos

Una verdadera épica fraternal y de reencuentro con los fundamentos más preciados de la doctrina masónica fue lo que permitió a la Gran Logia de Chile habilitar dos cuentas corrientes, una en Valparaíso y otra en Quilpúe,  con la finalidad de facilitar y centralizar la recaudación de recursos destinados a concurrir en auxilio fraternal de los Queridos Hermanos afectados. 

Los Venerables Maestros, Hospitalarios de Logias, los Miembros del Gobierno Superior de la Orden, el Supremo Consejo de los Grandes Inspectores Generales del Grado XXXIII, los Grandes Delegados Jurisdiccionales del Gran Maestro, los Consejos de Venerables Maestros pudieron tomar acción decidida en esta tarea que afectó a más de 20 familias de Hermanos.

 A ellos se les expresa una honda gratitud y reconocimiento junto a todas las Logias que contribuyeron generosamente a esta cruzada solidaria. Asimismo, a todos y cada uno de los Queridos Hermanos y sus familias que con genuina coherencia masónica mantuvieron vivos sus juramentos, promesas y principios, haciendo de esta tragedia una verdadera Cadena Fraternal, que deja, a modo de colofón, la conclusión indeleble que en la unidad y disciplina se construye la grandeza de las instituciones

La entrega de los fondos recaudados fue realizada por los Grandes Delegados junto a los Venerables Maestros y presidente de los COVEMAS de la jurisdicción Valparaíso y los Venerables Maestros  de Viña del Mar. Para ello, se contó con la presencia del Notario Carlos Wendt Gaggero de la Respetable Logia Abnegación 48 quien certificó el cumplimiento de cada uno de los montos entregados.

Primeras horas claves

La Gran Logia de Chile, encabezada por el Gran Maestro Sebastián Jans Pérez, creó, en las primeras horas de la fatalidad, un comité coordinador encabezado por el Gran Secretario General, Rodrigo Lillo Astorga, e integrado por el Gran Hospitalario, René Martínez Barros y miembros del Consejo de Beneficencia; por el Consejero de la Gran Logia de Chile, Daniel Moret Jiménez; por los Grandes Delegados Jurisdiccionales de las Jurisdicciones Valparaíso, Leonardo Santillán Guajardo; Viña del Mar, Francisco Verdugo Latorre; Liberato Minué Franco, José Martínez Vallejos y Gran Maestro Ramón Allende Padín, Leonardo Morales Segura; por el Gran Secretario General Adjunto, José Manuel King Díaz y por el Director del Departamento de Acción Masónica, Guillermo Torres M.

El objetivo era canalizar, rápida y oportunamente las ayudas a los Hermanos que habían sufrido pérdidas familiares y materiales.

Tareas y trabajos oportunos

Se habilitaron centros de acopio de víveres y enseres de primera necesidad en el Club Central, casa masónica que alberga a las Logias de Valparaíso, Club Libertad, que alberga a las Logias de Viña del Mar. Además, las casas masónicas de las Logias Luis Alberto Navarrete y López Nº124, La Búsqueda Nº182 y  Altas Cumbres Nº127.

La ayuda entregada consistió en alimentos no perecibles, agua en bidones y botellas, bebidas energéticas, artículos de aseo, ropa de hombre y mujer, artículos para bebés, juguetes para niños, leche y ropa de cama, para más de 20 Hermanos que habían perdido un familiar o en otros casos, las pérdidas eran materiales.

De esta manera las primeras ayudas pudieron distribuirse de inmediato, lo que enorgullece a la Institución por la fraternidad demostrada y la celeridad con que se concurrió a la zona siniestrada.

Departamento de Acción Masónica se moviliza

Docenas de Hermanos voluntarios, bajo la dirección del DAM y coordinados por la Logia La Búsqueda, pusieron todo su esfuerzo al concurrir a la zona afectada una fuerza de tarea donde  compartieron labores con Queridos Hermanos de la Región de Valparaíso agrupados con el mismo propósito: apoyar a los brigadistas que se encontraban en terreno con alimentos y líquidos; desarrollando además labores de remoción de escombros y limpieza de hogares siniestrados.

Más allá de la frontera masónica 

Asimismo, la fraternidad masónica traspasó la frontera de los Queridos Hermanos para ir en ayuda de un jardín infantil que, a escasos días de comenzar las clases, había perdido todo su material de trabajo e infraestructura. Se pudo equipar tres salas completas del párvulo de la Escuela Valle Independencia del sector Achupallas de Viña del Mar, que incluyó: mesas, sillas, escritorios, pizarras, proyectores, juegos didácticos y todo el set de materiales necesarios según los requerimientos planteados por el propio jardín. 

Es así como se pudo ir en ayuda de Hermanos que perdieron a seres queridos, sus viviendas y enseres, de modo de paliar de alguna manera el dolor ante tanta pérdida. Las acciones fraternales se coordinaron desde el seno de cada Logia, con el fin de maximizar los alcances de la ayuda y descentralizar el proceso. Es el eje central del compromiso de la Institución: seguir perseverando en las acciones que se estimen necesarias en ayuda de los Hermanos y comunidad en general.